Según los últimos reportes de investigación se espera que el mercado global de eLearning alcance los $350 mil millones en 2025, una cifra que demuestra que es una de las industrias que más crece a pesar de los baches económicos actuales. Además, se pronostica que, para el 2027, este mercado, que es uno de los más prósperos, alcanzaría a recaudar un billón de dólares, una cifra significativa y contundente que da cuenta de su utilidad e impacto en diferentes mercados.
Si bien las crisis económicas hacen tambalear a muchas industrias la del eLearning ha demostrado lo contrario, pues su alto nivel de adaptación es uno de los valores diferenciales con los que cuenta y que le permite crecer de manera exponencial incluso cuando económicamente ocurre todo lo contrario. No en vano, el mayor pico de crecimiento de los últimos años, ocurrió durante la crisis por COVID-19, que le permitió demostrar sus ventajas competitivas y atraer a millones de usuarios debido a su flexibilidad y reducción de costos en comparación a otros tipos de enseñanza.
En esta misma vía, se hace evidente, que las plataformas de aprendizaje están cambiando la forma en que las personas aprenden al proporcionar experiencias de aprendizaje más flexibles y personalizadas con la ventaja extra de que tanto los contenidos individuales como los contenidos modulares, los talleres y los seminarios pueden ser reproducidos desde cualquier lugar y en cualquier momento, lo que ha contribuido a que muchas empresas se pregunten si es momento para, además de gestionar el conocimiento interno que han adquirido por años, lo pongan en venta en forma de cursos y/o contenidos en línea.
De forma general es posible esbozar tres razones claves para entender el uso popular de las plataformas de aprendizaje y el gran interés que han despertado en diferentes organizaciones a punto de considerarlas como un medio óptimo para maximizar ganancias y atraer a muchos más clientes:
- Experiencias personalizadas de aprendizaje: brindar opciones de personalización del aprendizaje permite que los usuarios se adapten mucho mejor ante contenidos que pueden resultar engorrosos o difíciles de asimilar al punto de que sus necesidades e intereses priman sobre el contenido, lo que hace que se involucren activamente en el proceso y lo culminen con un alto grado de satisfacción.
Amplia variedad de contenidos guiados por expertos temáticos: internet bien podría ser un océano abierto en lo que respecta a información académica; sin embargo, garantizar que los contenidos temáticos y pedagógicos estén diseños por los mejores expertos es una tarea esencial para garantizar que el valor que se paga significa un retorno concluyente en cuanto al aprendizaje. Las plataformas de aprendizaje no solo albergan millones de contenidos sino que, además, permiten que expertos posicionen sus conocimientos y los compartan con alguien más de manera directa y eficaz.
Asincronía y ritmos propios de aprendizaje: el ritmo personal de aprendizaje es una de las variables más importantes a tener en cuenta en esta modalidad de enseñanza, y es que tradicionalmente, la sincronía de los espacios de enseñanza era hasta hace muy poco la única forma predominante mediante la cual los estudiantes y usuarios podían acceder a contenidos específicos; sin embargo, el modelo asincrónico permite aprendizajes sin presiones de tiempo en el intermedio y potencia rasgos tan importantes como la autonomía y la curiosidad, lo que conlleva a que estudiantes y usuarios puedan profundizar sobre ciertos temas y tomarse el tiempo necesario para comprender aquellos que, de otra manera, no recibirían tanta atención.
¿Cómo gestionar adecuadamente el conocimiento puede significar ventas exitosas y mayores ganancias?
La venta de cursos en línea ya es popular y es cada vez más rentable. Los cursos en línea son simplemente materiales educativos modulados distribuidos a través de Internet. Sus aplicaciones son educación formal/certificable, capacitación laboral/pasatiempo y mercadeo; este tipo de contenidos, cada vez más versátiles, son producto del dominio de expertos que, durante años, han refinado sus conocimientos y tienen gran habilidad pedagógica y didáctica para compartirlo con otros. Administrar adecuadamente todo el conocimiento que surge al interior de una firma, organización o compañía, es una ventaja competitiva que determina el rumbo de la misma y permite ampliar los márgenes de ganancia. La distribución de contenido curado, robusto e interesante atrae cada vez más a diferentes consumidores que buscan alternativas para desarrollar nuevas habilidad o reforzar aprendizajes y aptitudes que no han pulido del todo, por ello, diversas empresas, en las últimos décadas, han desarrollado modelos de aprendizaje para suplir esta demanda.
Miller & Co, una empresa argentina dedicada a la consultoría, implementación y Educación Building information models (BIM) que desde hace 25 años explora y experimenta alrededor de la Información para el Modelado de la Construcción. Esta compañía ofrece servicios de capacitación, outsourcing, implementación y govtech bajo la filosofía BIM a través del cual ordenan el flujo de personas, procesos y herramientas mientras integran a diferentes actores técnicos (y no) en entornos altamente colaborativos. A lo largo de su trayectoria ha formado y certificado a más de 10.000 profesionales, lo que los ha convertido en un referente en lo que respecta a enseñanza y aprendizaje bajo este modelo. Sus cursos no solo se estructuran bajo el protocolo BIM sino que además están ajustados a las normas ISO 19.650, lo que garantiza su calidad y robustez conceptual.
¿Qué fue lo disruptivo de Miller & Co?
Después de posicionar la compañía durante años, por medio de actividades concretas en el campo de la arquitectura, Miller & Co vio en el horizonte una oportunidad de negocio y decidió no desaprovecharla: distribuir contenidos de aprendizaje muy concretos y conectar a viejos y nuevos usuarios por medio de metodologías de aprendizaje flexibles, asincrónicas, de bajo costo y que además están certificadadas a nivel internacional. Este movimiento, ágil y preciso, le permitió a la consultora atraer a nuevos clientes y fidelizar y vincular a los que ya los conocían, lo que se tradujo no solo en posicionamiento de marca sino en ingreso extra tras años y años de tecnificar saberes específicos.
En términos de beneficios de marketing, los cursos en línea funcionan como un excelente imán de prospectos y, por ello, a menudo se usan a modo de oferta presentada en una página de destino. Los cursos en línea significativos facilitan la entrada de clientes potenciales en su embudo proporcionando clientes valiosos y que se convertirán al poco tiempo. Por supuesto, esto requiere que el creador del curso haga un seguimiento de su curso con las mejores prácticas de marketing digital para obtener resultados óptimos. Y, por último, pero no menos importante, los materiales de capacitación brindan capacitación interna y liderazgo intelectual en las circunstancias adecuadas. Las aplicación interna de diferentes cursos en línea incluye solidifica conocimientos de diversa índole y en ocasiones sirve de motor para buscar nuevas respuestas o caminos de aprendizaje de forma colectiva, por lo que no solo quienes exteranmente adquieren el contenido se benefician sino que aquellos, que pertenencen a la compañía, pueden actualizar sus conocimientos.
¿Qué beneficios trae vender cursos en línea?
La venta de cursos en línea implica beneficios similares, pero sutilmente diferentes si los destinatarios son empresas o personas naturales. Las empresas suelen lanzar cursos en línea por una sencilla razón: son buenos para las ventas. Si se administra un negocio con un producto o servicio que puede reforzarse con un curso, configurar uno en línea puede ayudar ya que este tipo de contenido proporciona lecciones y compromiso individual que el cliente ve como valor añadido, por lo que querrá vincularse más activamente con la compañía y adquirir sus productos sin temores añadidos como cuando decide cambiar de proveedor.
Además del valor para el cliente, el contenido del curso puede ser excelente para el conocimiento de la marca . Ser un negocio en el que la gente hace compras es genial. Pero ser el maestro de confianza del cliente lo coloca en una categoría más alta dentro de su industria. El liderazgo intelectual es una posición cada vez más importante , especialmente para las empresas B2B. Los creadores de cursos son naturalmente análogos a los líderes de opinión.
¿Cuál es el rol que cumplen las plataformas de aprendizaje en este proceso?
De manera sencilla desligarse de tareas engorrosas como la administración e implementación de contenidos le permitirá a los miembros de la empresa enfocarse en tareas realmente inaplazables y prioritarias. Las plataformas de aprendizaje, además de ser entornos en los cuales se distribuyen contenidos de formación, pueden también generar encuestas, test, evaluaciones diferenciales y permitir rutas de aprendizaje intuitivo y personalizado, lo que significará, a la largo y corto plazo, mayor satisfacción para el usuario y ganancias sin esfuerzo extra.
Adquirir una plataforma adecuada que no solo haga fácil el proceso sino que sea rentable para vender y compartir contenido es un paso importante y determinante en esta carrera, ya que un mal entorno puede echar a perder años y años de conocimiento acumulado que no proporcionarán satisfacción al usuario final de ningún modo.
Es por ello que brindar experiencias de aprendizaje ricas y bien estructuradas, de la mano de un LXP, por ejemplo, hará la diferencia. Incluir realidad aumentada y virtual, microvideos, widgets, gamificación por etapas y otras experiencias inmersivas mejorará la experiencia de aprendizaje y motivará a usuarios y estudiantes. Lo disruptivo de Miller & Co, además de gestionar y distribuir su contenido, también está en la selección de la plataforma en la que se aloja sus cursos, es decir, Zalvadora. La plataforma y la herramienta Comunidades se fusionaron para entregar lo mejor y obtener los mejores resultados. Mientras la interfaz ligera, amigable e intuitiva de Zalvadora proporciona entornos virtuales de aprendizaje acordes con las necesidades y requerimientos tecnológicos y técnicos para contenidos BIM, la herramienta Comunidades, dotó a cada curso con una comunidad propia de aprendizaje en la cual los conocimientos se nutrían y transformaban en escenarios de discusión, cambio y renovación.
Con más de 400 estudiantes al mes y, con un alto grado de satisfacción por parte de los usuarios, esta alianza entre compañías evidenció que gestionar el conocimiento adquirido durante año, de la mano de herramientas tecnológicas de vanguardia, puede significar un paso sólido en el mundo edtech que solo crece y espera respuestas innovadoras en momentos de quiebre o cambio.