Es un procedimiento en el cual se busca detectar y relacionar las obligaciones, responsabilidades y competencias que requiere un puesto de trabajo, entre otros. El análisis de puestos contribuye para que la organización tenga claras las funciones que se desarrollan y quiénes las deben desarrollar, para entender las necesidades de personal actuales y futuras de la organización, y para que pueda hacerse la proyección de nuevos cargos y de recursos para su efectiva provisión.
Un análisis de puesto es una especificación paso a paso de los requisitos, funciones y procedimientos de un puesto de trabajo. Así como una semilla no puede convertirse en una flor a menos que el terreno esté debidamente preparado, muchas prácticas de gestión de recursos humanos no pueden convertirse en una ventaja competitiva a menos que se basen en un análisis de trabajo adecuado.
Las prácticas exitosas de RH pueden conducir a resultados que crean una ventaja competitiva. Los análisis de puestos, realizados correctamente, mejoran el éxito de estas prácticas de gestión de recursos humanos al sentar las bases. La información del análisis de puestos se puede aplicar a una variedad de prácticas de gestión de recursos humanos.
La gran cantidad de información que se puede descubrir durante un análisis de trabajo puede ser abrumadora, pero generalmente no es necesario recopilar todos los datos posibles. El propósito o el uso previsto del análisis de puestos dicta la información particular que debe recopilarse. Por lo tanto, el analista debe decidir cómo se utilizará el análisis del puesto antes de decidir qué información buscar.